El martes en APADIM compartimos una verdadera fiesta a la educación junto a los estudiantxs, familias, docentes y equipos técnicos-directivos del nivel secundaria de APADIM.
Una fiesta que nos encontró para celebrar el logro de los y las estudiantes que han alcanzado una meta importante en su trayectoria escolar y juntos también celebrar la novedad de que estamos transitando, como institución educativa, una comprometida tarea de articulación de ambas escuelas y ciclos educativos.
Es por eso que en el acto de este cierre escolar fue organizado, por primera vez, por ambos ciclos educativos celebrando la culminación de 18 jóvenes del primer ciclo del nivel de educación secundaria y el egreso y despedida de 15 estudiantes, quienes recibieron la certificación de finalización de la secundaria.
Como comentaba Sonia Ghirardo, directora de la Escuela, donde se cursa hasta tercer año, sobre esta articulación institucional y lo importante de este acto en conjunto: “Esto nos llevan a redefinir el sentido, estructura y objetivos del nivel educación secundaria, en tanto unidad pedagógica, con vistas a dar coherencia y continuidad a las trayectorias escolares de cada estudiante”
Si pensamos la educación como un acto político que se construye colectivamente, es necesario poder abrir procesos para pensar y construir acuerdos, compartir miradas y saberes que promuevan la articulación en este nivel educativo, como enfatizaba Ghirardo: “garantizando de esta manera el derecho a la educación de los y las estudiantes y la continuidad de su trayectoria escolar en dicho nivel”.
Con el entusiasmo y la importancia de poder celebrar esta etapa tan importante para los estudiantes, compartimos el paso de la posta a los estudiantes en el honor de portar las banderas nacional y provincial y las palabras de despedida de los estudiantes a sus compañeros que egresan. También hubo muestras de acompañamiento y de apoyo al nuevo camino que inician los estudiantes en cálidas palabras de las familias del nivel de primer ciclo.
A los egresados el deseo fue a que comiencen a volar sus propios sueños y nuevos proyectos, así como expresaba Ester Frola, directora de los últimos años de la secundaria en la Escuela de Formación Integral: “Los jóvenes se van y al medio nos cambiaron la vida y la mirada, nos hacen entender que podemos ser puentes o paredes, que los adultos somos responsables de sus presentes para que construyan sus propios futuros”.
Es una oportunidad para vernos y construirnos con otros y otras y hacer de este espacio compartido una mejor escuela, la que genera esperanzas, que permite posibilidades y futuros y cómo nos organizamos para que las personas con discapacidad cuenten con más herramientas para construir sus propios proyectos de vida.
Como culminaba en sus palabras a los egresados Ester Frola: “Porque la escuela es un espacio para ensayar la vida, para cometer todos los errores que quieran y aprender de nuevo. Para eso estamos, para jugar con cada uno diferentes formas de pensar el mundo”.
Y como toda fiesta hubo música en vivo a cargo de los y las jóvenes de 6 año con la Orquesta de Percusión Nativa y la versión teatral musical de lxs chicxs de 2do año interpretando algunas de las escenas típicas e históricas de El Chavo del 8.
Este año fue una fiesta colectiva, de encuentro, de color, música y emociones, que culminó con la esperada cena de egresados que festejamos junto a las familias.
Tenemos mucho por hacer. Apoyanos para seguir construyendo una sociedad más inclusiva. Aquí te contamos cómo.
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