El sábado nos encontramos en el último módulo del curso, para compartir las reflexiones y los trabajos que los asistentes realizaron como instancia final, destacando el encuentro como un espacio para socializar procesos, saberes y experiencias durante el curso.
De esta manera, con exposiciones grupales o individuales fuimos compartiendo los trabajos que, tomando distintas temáticas, no sólo articulaban la Convención y la perspectiva de derechos humanos, sino que daban cuenta de posicionamientos teóricos, aprendizajes y críticas sobre experiencias diversas.
Trabajos que, a partir de trabajo exploratorio sobre los temas propuestos en el curso, propiciaron que los asistentes fortalecieran no sólo su trabajo y/o prácticas cotidianas, institucionales, familiares y sociales, sino la incorporación de la riqueza de saberes y reflexiones colectivas.
A partir de materiales teóricos, experiencias diversas y disparadores para la reflexión y el debate para la producción de conocimientos y procesos en los que cada uno fue protagonista, el curso propone ahora pensar -nos cómo siguen estos procesos que nos tienen como protagonistas, desde los lugares de cada uno, articulando en redes con objetivos comunes que abonen a una instalación cada vez más profunda de la perspectiva de derechos humanos.
Durante estos encuentros las informaciones que compartimos, mediante debates y reflexiones que convertimos en conocimientos compartidos se ponen en juego en la proyección que hagamos en nuestros trabajos, en nuestras militancias, en nuestras vidas.
Materiales teóricos, experiencias diversas y disparadores para la reflexión y el debate para la producción de conocimientos y procesos en los que cada uno es protagonista.
Un sábado con reflexiones y propuestas, pero con la necesidad de continuar pensando estos procesos y sobre el futuro hacia la construcción de sociedades inclusivas.
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