A pesar de contar con leyes que las protegen, miles de personas con discapacidad padecen que no se respeten sus derechos. Así lo denuncian las OSC con programas en esa área, mientras que los especialistas alertan cobre la necesidad de promover un mayor compromiso del Estado y la sociedad civil para alcanzar la real integración de quienes tienen necesidades especiales.
Era verano en Buenos Aires y los rayos del sol proponían una jornada ideal. Marisa imaginó descansar sobre la arena, recorrer una plaza e ir al cine. Sin embargo, distintas barreras arquitectónicas le impidieron acceder a esos espacios. Tal como también le ocurrió al pretender utilizar un medio de transporte.
Si bien las leyes garantizan los derechos de más de dos millones de argentinos con discapacidad, las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) entrevistadas por RIS- Argentina reclamaron por la escasez de centros de rehabilitación, la falta de oferta laboral y de acceso a la educación, y el deficiente desempeño de los organismos creados para controlar las políticas públicas en ese sentido. No obstante, rescataron que el conocimiento público de la problemática se incrementó en los últimos años.
La falta de interés y voluntad política por parte de los gobernantes, así como la ausencia de protagonismo de toda la sociedad son los principales factores que hacen al incumplimiento de las leyes que protegen los derechos de las personas con discapacidad, según coincidieron en afirmar las OSC consultadas por este medio. Asimismo, reclamaron que el Gobierno controle el cumplimiento de la normativa vigente, y promueva iniciativas de concientización social, entre otras acciones. "El país en verdad cuenta con leyes de avanzada en la temática", opinó Marina Klemensiewicz, directora ejecutiva de la Fundación Par.
Pero aclaró que las normas no se respetan "porque el Estado no informa, no difunde, no vela, no controla, no sanciona y no tiene interés en hacerlo". Además, "porque la población, y en especial quienes tienen discapacidad, quedan atrapados en un sistema asistencialista institucionalizado que no promueve su autonomía". En el mismo sentido se refirió el titular del Foro Pro, el padre Pablo Molero, al afirmar que "no hay decisión política para tratar esta problemática y falta exigencia por parte de toda la sociedad".
A su turno, María Elena Dal Bó, especialista en dificultades intelectuales y en educación de personas con discapacidades múltiples, consideró que "existen cada vez más funcionarios de ciertas áreas técnicas comprometidos con el tema, pero éstos son aportes personales y lo que necesitamos son políticas"."Hay todavía muchos prejuicios y demasiada discriminación por parte de la sociedad, puesto que en el ranking de denuncias figuran las personas con discapacidad como las más discriminadas a causa de la falta de accesibilidad en el transporte de pasajeros o por el maltrato que reciben de esas empresas. Pero estamos avanzando desde este Gobierno para revertir esa situación, aunque el camino a recorrer es muy largo, porque la promoción de un cambio cultural en la Argentina no se logra de un día para otro", puntualizó la titular del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi), María José Libertino.
En tanto, un reclamo que se ubica en la mira de las OSC es el referido a la concientización de la comunidad. En ese sentido, el presidente ejecutivo de la organización Cilsa, Juan Vega, fue contundente: "Hemos sido tan castigados con este incumplimiento que definitivamente nos terminaron cansando. Por eso, ya no nos aferramos a las leyes, aunque sí deseamos que se apliquen de una vez por todas, sino que apelamos al compromiso social".
"La sociedad tiene algo más de conciencia y en muchas áreas da la bienvenida a las personas con discapacidad, aunque todavía muchos siguen sin verlas", aseguró Dal Bó. Así, distintas OSC llevan adelante campañas que involucran la participación. La Asociación Civil La Usina impulsa, por ejemplo, la recolección de 500 mil firmas que serán presentadas ante el Gobierno nacional con el objetivo de que controle el cumplimiento de la legislación vigente. "Todos los días hay un desafío diferente para las personas con discapacidad. Esto produce que no puedan interactuar en todos los ámbitos de una sociedad democrática, plural, sustentable y desarrollada", puntualizó la directora de la entidad, Beatriz Pellizzari. Si bien uno de los principales desafíos del sector es garantizar la accesibilidad al medio físico (Ver recuadro) , existen otras barreras que no son arquitectónicas que impiden el desenvolvimiento de estos grupos.
En el área de la comunicación, la mayoría de los softwares y sitios de Internet no utilizan criterios que contemplen a las personas con discapacidad. Para contrarrestar esas dificultades, técnicos argentinos y de todo el mundo crearon mouses y teclados adaptados y diseñaron herramientas para PC, teléfonos celulares, escáner y semáforos, entre otros. Así, algunas fundaciones empresarias, en colaboración con las OSC, desarrollan programas tendientes a promover la inclusión de chicos y jóvenes con necesidades especiales a partir de la capacitación en el uso de las tecnologías adaptadas a la informática. "Existe un antes y un después en las personas con discapacidad porque ahora las nuevas tecnologías les facilitan interactuar en todo sentido con el mundo exterior", subrayó Jorge Leiva, gerente de programas de Educación y Nuevas Tecnologías del portal Educared, de la Fundación Telefónica.
La capacitación en ese sentido "permite acceder al aprendizaje, la comunicación con los demás y la integración en el aula con estudiantes sin discapacidad, incluso estudiar a distancia", opinó Silvia Bersanelli, titular de la Dirección de Educación Inclusiva del Gobierno de La Pampa. Si bien las tecnologías digitales tienden a reducir al mínimo las limitaciones comunicacionales, plantean nuevos obstáculos: los elevados costos de los programas y equipos adaptados. Al respecto, Bersanelli reclamó la necesidad de profundizar investigaciones en el país que promuevan la creación de dispositivos técnicos y el incremento de recursos con el objetivo de acercar las nuevas tecnologías a toda la población con discapacidad.
La reducida oferta de centros de rehabilitación psicofísica es otro de los cuestionamientos frecuentes entre las instituciones. "Hay pocos servicios tanto estatales como privados. Éste es otro incumplimiento más de la legislación", advirtió el padre Pablo Molero, del Foro Pro, una entidad que agrupa a más de 500 organizaciones dedicadas a la temática de la discapacidad. "Es cierto que hay pocos servicios de rehabilitación", admitió la titular de la Comisión Nacional Asesora para la Integración de Personas Discapacitadas (Conadis), Susana Sequeiros, quien comentó que el Gobierno nacional "está trabajando con varias jurisdicciones en busca de la conformación de redes de servicios de este tipo en todo el país". El reducido número de profesionales graduados dentro de este grupo humano despierta preocupación en el sector social, pero también en el sector privado. "No encontramos personal idóneo", afirmó María Eugenia Giró, del Club de Empresas Comprometidas. "No asisten a la universidad puesto que pocos terminan la escuela primaria y muchos menos cuentan con el ciclo secundario. Esto se debe a que la enseñanza dista de ser inclusiva y los establecimientos educativos presentan muchas barreras físicas que dificultan el acceso", explicó Giró durante las jornadas Enfoque Social de la Discapacidad, organizadas por la Universidad Católica Argentina (UCA). Algo similar expresó Nélida Galloni, integrante del Programa Universidad y Discapacidad de la UBA: "Las deserciones en los niveles primarios y secundarios son muy numerosas puesto que una persona con discapacidad afronta además de las dificultades de todo alumno otras vinculadas con su situación de salud: horas de rehabilitación, tratamientos específicos, estudios especiales como el aprendizaje del braille, la lengua de señas o la oralización".
"Las barreras físicas en los edificios escolares y el transporte hasta ellos son el otro gran desafío que deben afrontar con el esfuerzo moral y económico que implica", consideró la arquitecta. En este escenario, "la accesibilidad al medio físico y social es una medida necesaria para lograr la inclusión de todas las personas, independientemente de su sexo, edad y condición física o mental", sintetizó Eduardo Schmunis, director del Centro de Investigación y Asesoramiento sobre el Hábitat Gerontológico de la Sociedad Central de Arquitectos.
Fundación Par: (011) 4772- 8892 - marinak@fundacionpar.org.ar - www.fundacionpar.org.ar
La Usina: (011) 4372- 1266 - comunicaciones@lausina.org - www.lausina.org
Cilsa: (011) 5941- 1929 - pzalieckas@cilsa.org.ar - www.cilsa.org.ar
Acceso Ya: (011) 4780-5817 - info@accesoya.org.ar - www.accesoya.org.ar
Foro Permanente para la Promoción y la Defensa de los Derechos de las Personas con Discapacidad (Foro- pro): (011) 4502- 5137
Sociedad Central de Arquitectos :www.socearq.org/ Programa Universidad y Discapacidad de la UBA : www.fadu.uba.ar Educared : www.educared.org.ar
Dirección de Educación Inclusiva Ministerio de Cultura y Educación de La Pampa : 02954-420345-dinclusiva@mce.lapampa.gov.ar
Instituto Nacional contra la Discriminación, Xenofobia y Racismo (INADI):(011) (011) 4346-1734- inadi@inadi.gov.ar - www.inadi.gov.ar
Comisión Nacional Asesora para la Integración de Personas Discapacitadas (Conadis): 0800-333-2662 - privada@cndisc.gov.ar - www.cndisc.gov.ar
Fuente:http://www.risolidaria.org.ar/canales/contenido/nota/masinfo.asp?nota=12344&relacion=12344
Para integrar de verdad
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario